lunes, noviembre 17

La personas escriben sobre amor..

Como un agujero en mi pecho. Así es su ausencia. Y la mayoría del tiempo la tengo.

Las personas escriben sobre amor por naturaleza. Incluso el más duro y la más dura se ablandan cuando aman, solo que no siempre sale bien, no siempre se da con la persona adecuada. Los corazones se rompen. Hay gente que decide restaurarlos y gente que decide dejar por el suelo los miles de pedazos. Este el paso que diferencia el amor del odio.
Personalmente he visto gente que ama, sin más. Gente que cree que ama y no lo hace. Gente que dice que se enamora por ver una cara bonita. Gente que tiene una vida de mierda y al recibir un poco de cariño creen tocar el cielo. Gente que ve amor y busca enamorarse. Gente que se niega a amar porque ya sufrieron en su momento. Gente que no sabe lo que es amar.

Para la mayoría solo soy un niñato que cree saber de lo que habla. Y quizá tengáis razón, ¿por qué no puedo ser uno más que cree que ama sin hacerlo? Pero la verdad es que ya he vivido gran parte de las cosas que escribo. Quizá demasiado pronto. Yo no sabía lo que era amar -si os pasa esto es una gran putada-. Vi una cara bonita sin sentimientos por la que derramé lágrimas sin sentido. Después creí amar sin hacerlo, recibí un poco de cariño y me vi en lo alto. Luego aprendí a amar, lo hice, sufrí, seguí llorando y me negué a volver a intentarlo. Pero no. Ahora amo, amo sin más.

Si me viera a su lado por la calle, yo sentiría envidia de mí mismo.

Me bastó un día para confirmar que era ella. Sí, confirmar, porque ya creí saberlo incluso antes de verla. Es una locura pensarlo y más aún decirlo. Pero me bastó un día. Es probable que ni ella recuerde esto, pero en aquella despedida frente al bus, entre lágrimas -quién cojones llora en la primera cita-, se me escapó un te amo. Joder que si lo sabía, era ella. Es ella.
Podría describiros lo que es amar, pero no lo que es encontrar a la persona que es para ti, precisamente para ti, de entre tantos millones de personas. Diga lo que diga me quedaré corto.
Simplemente es algo que se sabe, algo que sientes y que nunca has sentido antes.
Como una piedra partido en dos trozos que encajan a la perfección, que se complementan como el yin y el yang -como el blanco y el negro-. Las manos encajan exactas, los abrazos son absolutamente necesarios cada día, los besos nunca sacian suficiente, su voz te hace sonreír, su sonrisa te encoje el corazón, su piel eriza la tuya. Prefieres un minuto antes que cualquier otra cosa sin ella. Te sientes vacío cuando está lejos, sientes que no puedes cuando no está. Vives para estar con esa persona.

Hay quien dice que el amor es perfecto cuando es imposible; cuando no puede llevarse a cabo y permanece para siempre tal y como es. Sin llegar a perderse, sin sufrir daños. Sin vivirlo. Pues yo nos veo por encima de eso, capaces de vivir este amor sin romperlo. Quiero gastar mi vida a su lado, sonreír y llorar con ella, Quiero ser eterno de su mano, y que ella lo sea de la mía.

Cómo evitar que se encoja mi corazón con cada uno de sus 'No me dejes nunca'.

Las personas escriben sobre amor por naturaleza. Incluso el más duro y la más dura se ablandan cuando aman, solo que no siempre sale bien, no siempre se da con la persona adecuada. Los corazones se rompen. Hay gente que decide restaurarlos y gente que decide dejar por el suelo los miles de pedazos. Este el paso que diferencia el amor del odio.

Yo decidí reconstruir mi corazón al conocerte. Decidí dejar que me ayudaras y ayudarte con el tuyo. Las personas escriben sobre amor por naturaleza, y yo escribo sobre amor por ti. Eres tú quien inspira cada palabra que estás leyendo. Gracias por hacerme tocar el cielo, por hacerme sentir mejor que el resto, porque yo tengo el honor de que me ames y me dejes amarte. Gracias Tere.